- Quiero ir a buscar la cámara- dijo la mayor de ellas con cierto aire de superación.
Agarró las llaves y se escabulló junto a sus amigas. Seguían riendo jocosamente, se acomodaban el pelo, subían el médano.
-Mamaaa, ¿me levantas la ojota? - Escuchó decir la mayor, mientras tropezaba con dicho objeto. Lo agarró y se lo acercó al joven que la miraba con una sonrisa amable.
Ella le devolvió la sonrisa dándose cuenta lo bello que era aquel muchacho.
Continuó su trayecto riéndose en silencio, volteando a sus espaldas para volver a toparse con los dulces ojos del joven. Cuando llegó a su casa,abrió la reja y sus amigas entraron.. ella atinó a saludar y tirarle besos al chico de la ojota -Chau mi amor!- Estaba tan cegada por él que cuando quiso entrar a la casa, se chocó con el portón. Sus compañeras volvieron a reir desaforadamente, ella las imitaba trémulamente mientras seguía buscando aquellos ojos, que se habían esfumado repentinamente...